Después de un mes de vacaciones
desde el último post, vuelvo a la carga...
Y qué pasó?, por qué
un mes sin escribir?, se acabaron las ideas?, no tenía nada de lo
que opinar, contar, incomodar, replantearle a la sociedad?...
No señores!, nada de eso!; tengo
muchísimas ideas, incluso puedo ser una gran opinóloga...
El motivo es fácil, estaba con lo
que en España llaman “morriña” ó “nostalgia” ó
“extrañando”... creo que me está pasando lo que a muchos
inmigrantes: queremos hacer nuestra vida en el lugar en el que en
este momento vivimos, pero también queremos estar con la gente que
solíamos estar...
Por ejemplo, sé que se van a
encontrar mis amigos en casa de alguno de ellos... yo quiero
ir!!!!... y cuando nos despidamos me vengo a mi casa... qué fácil
sería que alguno me acercara con el coche hasta la parada del
autobús...
Ya sé que son decisiones que uno
toma y se la tiene que bancar, pero bueno, a veces no es tan fácil
bancarselo... y esa frase “no soy de aquí ni de allá” empieza a
ser muy cierta...
Una amiga escribió el otro día
en su blog sobre “los migrantes del amor”
(http://cuadernodeceleste.tumblr.com/post/20762182024/los-migrantes)...
esas personas que dejan su lugar de origen para vivir en el de origen
del ser amado... claro que para eso habría que conocer primero al
príncipe azul (asfixiado) y luego marchar... no fue mi caso, el amor
me sorprendió (ups, qué sorpresa!) cuando ya había decidido que me
quedaba... asique ni siquiera le puedo reprochar algo al ser amado,
ufff...
Pero cómo se hace cuando se hecha
tanto de menos?... y lo peor es que se sabe que si voy, estaré
deseando volver a mi casa... uy!, qué lío!!!! y más cuando el
universo se complota en recordarte que extrañás... volvés de la
compra y de pronto tu “ser amado” está silbando “volver, con
la frente marchita”; “no podes silbar otra cosa?!”... estoy en
el metro y suena un móvil con “Adiós Nonino”; por favor!,
déjenme en paz!!!...
En fin, es muy difícil tener una
conclusión... Digamos que es bueno tener amigos acá, allá y por
ahí también... cada uno participa de tu vida de distinta manera,
por eso todos son extrañables por entrañables...
...y por su culpa ahora tengo
morriña...
Lo bueno de estar lejos es tener algo/alguien a quien extrañar. Peor sería dejar todo atrás y no haya nada para recordar!. Además sabes que a vos también te extrañan, y si te extrañan es porque te quieren y eso está buenisimo! así que arriba ese ánimo que los que quedamos de este lado del charco siempre nos acordamos de vos y te queremos de a millones!!!!
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